viernes, diciembre 01, 2006

Poniendo la casa en orden

Hoy ponemos la casa en orden con la sinvergüenza. Seguramente será una conversación áspera y amarga. Un mal momento que perfectamente podría haberse evitado si la otra parte hubiese sido honesta. Pero los sinvergüenzas son así, caradura. Siguen un mismo patrón: se olvidan de los acuerdos, de que tenían que pagarte, te dan excusas inaceptables, y te juegan sucio en forma solapada. Nosotros hemos actuado siempre correctamente y lo seguiremos haciendo. Voy a plantear mi propuesta de arreglo, en buena. Pero no voy a tolerar más jugarretas, ni postergaciones, ni cambio de reglas. Si no hay entendimiento, tal vez perdamos una plata que legítimamente nos correspondía, pero ella no la va a sacar barata... eso lo garantizo. Y voy a gozar mi venganza, así como nos tuvimos que mamar los malos momentos que nos hizo pasar.

1 comentario:

Hombre del Cintillo dijo...

No queda otra mas que jugar con la misma moneda con que ellos usan. Deberia usar una palabra algo mas fuerte, pero ya, olvidenlo. Lo importante fue, como me contaste ayer, que la paraste los carros a esta pastelita.

Ro!